Salud

Cómo distinguir si se tuvo dengue o zika: un test en desarrollo apunta a la diferencia

Como ocurre con el dengue, el virus Zika también se transmite a los humanos a través de la picadura de mosquitos infectados. Se trata de un patógeno que fue descripto por primera vez en Uganda, África, en 1947. En 2015 fue detectado por primera vez en América y se produjo un brote epidémico que empezó en Brasil y se extendió a otros países en Sur, Centroamérica y el Caribe.

Aún el Zika sigue circulando en la región, y este año hay 381 casos de personas con el diagnóstico confirmado en América, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Sus síntomas son fiebre, dolor articular, erupción cutánea y conjuntivitis.

Científicos que trabajan en los Estados Unidos y Brasil están desarrollando un test que permitirá distinguir si una persona tuvo dengue o zika previamente. “El ensayo aún se encuentra en las primeras etapas y estamos trabajando para desarrollarlo aún más”, dijo a Infobae la doctora Priscila Castanha, profesora asistente en el Departamento de Enfermedades Infecciosas y Microbiología en la Universidad de Pittsburgh.

La investigación está siendo llevada a cabo con fondos públicos. Es financiada por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de EE.UU. El biomarcador consiste en una molécula sintética específica del virus del Zika. Posibilitaría diferenciar las muestras de pacientes inmunes al Zika de las de pacientes previamente infectados por el virus del dengue.

Los científicos publicaron el martes 14 de mayo el estudio en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). Consideran que los resultados podrían contribuir al desarrollo de mejores diagnósticos y vacunas.

La investigación fue dirigida por expertos de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Pittsburgh y del Instituto Herbert Wertheim UF Scripps de Innovación y Tecnología Biomédicas en los Estados Unidos.

Es el primer trabajo que aplica una innovadora tecnología de “sustitutos epitópicos” al virus del Zika. Hasta ahora, los investigadores y los médicos carecían de herramientas de diagnóstico para diferenciar fácilmente entre infecciones previas por distintos flavivirus, una familia de virus transmitidos principalmente por mosquitos y garrapatas que incluye el Zika y el dengue. Eso ha dificultado los estudios clínico-epidemiológicos, el diagnóstico y el desarrollo de vacunas.

“Si se va a lugares como Brasil, casi todo el mundo va a tener cierta inmunidad al dengue, y también al Zika”, dijo la doctora Castanha. “Esto hace que sea muy difícil probar nuevos tratamientos o determinar cuán extendida puede estar una enfermedad emergente en zonas endémicas de flavivirus, que causan una alta carga de enfermedad a nivel mundial”, explicó.

Los anticuerpos contra el virus del Zika pueden confundirse en muchas pruebas de diagnóstico con anticuerpos contra el virus del dengue. Es una barrera que dificulta saber si alguien que da positivo tuvo previamente dengue, Zika o ambos.

En el caso de las mujeres en edad reproductiva, es importante que puedan saber si ya han padecido el virus del Zika y si tienen inmunidad, porque la infección durante el embarazo puede causar defectos congénitos. Saber si tienen inmunidad o no podría orientar el alcance de los esfuerzos de las personas para evitar los mosquitos en zonas endémicas durante el embarazo.