Capturados 108 presos que huyeron en Nigeria tras ataque a una cárcel
14
Sep
La Policía capturó al menos a 108 presos de los 240 que escaparon el pasado domingo por la noche tras un ataque de hombres armados a una prisión en el centro de Nigeria, informaron este martes a Efe las autoridades penitenciarias.
«Sí, hasta ahora hemos recapturado a 108 de los presos que escaparon tras el ataque a la prisión de (el estado de) Kogi», declaró por teléfono el portavoz de los Servicios Penitenciarios de Nigeria (NCS, por sus siglas en inglés), Francis Enobore.
«A todos ellos los capturamos ayer por un equipo combinado de nuestros hombres y otras agencias de seguridad hermanas. Esperamos recapturar más hoy. Activamos los mecanismos adecuados para asegurar que todos los presos que huyen los regresen», agregó.
El asalto ocurrió en el Centro Penitenciario de Kabba en Kogi alrededor de la medianoche del domingo.
Los atacantes, numerosos y bien armados, entablaron batalla con los guardias de la prisión e intercambiaron disparos.
«Vinieron en gran número, alrededor de 50 de ellos en al menos 17 furgonetas. Se enfrentaron a nuestros guardias desde la medianoche hasta alrededor de las tres de la mañana del lunes», reveló a Efe una fuente del NCS que pidió el anonimato.
«Desafortunadamente, perdimos personal de seguridad a manos de los matones», aseguró esa fuente, sin facilitar cifras de víctimas.
CENTRO PENITENCIARIO DE NIGERIA
El Centro Penitenciario de Kabba albergaba a 294 presos antes del ataque, de los cuales 70 eran condenados y 224 estaban a la espera de juicio.
La inseguridad es un gran problema en varias zonas de Nigeria, la nación más poblada de África, especialmente en la mitad norte del territorio.
La violencia abarca desde el yihadismo y los incidentes de tensión intercomunitaria hasta la ola de secuestros masivos que vive el centro-norte y el noroeste del país, enfocada sobre todo en raptos en centros educativos por parte de hombres armados -denominados en el país «bandidos»- que buscan lucrativos rescates.
El estado de Kogi, cercano a Abuya, la capital nigeriana, ya vivió en el pasado ataques a cárceles y fugas.
En 2014, presuntos terroristas del grupo yihadista Boko Haram liberaron a 144 presos (la mayoría a la espera de juicio por robo) y mataron a otro en el presidio de Koton-Karfi.
En 2016, otros trece escaparon de ese mismo centro y en 2019 los derrumbes causados por una inundación permitieron la fuga de otros 228.
Otras regiones nigerianas también sufrieron ataques a prisiones en los últimos tiempos, especialmente en el sureste, donde actúan grupos separatistas.