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Parlamento finlandés tumba ley de confinamiento por inconstitucional

La comisión constitucional del Eduskunta (Parlamento finlandés) frenó este miércoles la tramitación del proyecto de ley del Gobierno que establece el confinamiento de la población, por considerarlo inconstitucional y desproporcionado.

La comisión parlamentaria cree que el proyecto de ley, que busca restringir la libertad de movimiento de los ciudadanos en las regiones con mayor incidencia de coronavirus, no se ajusta al marco constitucional, por lo que pidió al Gobierno que presente una nueva propuesta.

El actual proyecto prohíbe a los ciudadanos abandonar su domicilio sin un motivo justificado para evitar que siga extendiéndose el virus entre la población, aunque permite realizar ciertas tareas consideradas esenciales.

Según la comisión constitucional, esta prohibición «constituye una injerencia de gran alcance en los derechos fundamentales de las personas».

Esta prohibición, consideró la comisión, «constituye una injerencia de gran alcance en los derechos fundamentales de las personas» y no puede considerarse una medida proporcionada, como estipula la Constitución.

En su opinión, el objetivo de contener la expansión de la pandemia puede alcanzarse también mediante restricciones menos severas que el confinamiento de la población.

«Podemos lograr el mismo objetivo con medidas más suaves. Las prohibiciones y restricciones pueden dirigirse directamente a las fuentes conocidas de infección, como eventos privados, reuniones, iglesias, mezquitas y visitas a tiendas», señala la comisión en un comunicado.

El Gobierno finlandés presentó el proyecto de ley el pasado jueves ante un repunte de la pandemia, con el objeto de imponer un confinamiento de la población en al área metropolitana de Helsinki y la ciudad de Turku, las regiones con mayor incidencia de covid-19.

La medida hubiera afectado a un total de 1,5 millones de personas, uno de cada cuatro habitantes del país nórdico.

Finlandia mantiene en vigor el estado de excepción declarado el 1 de marzo para luchar contra la pandemia, lo que permitió a las autoridades cerrar los bares y restaurantes en las regiones con mayor ritmo de contagios.

El país nórdico registra una incidencia acumulada de 143,5 contagios por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, una cifra que se dispara hasta los 415,9 casos en la capital, Helsinki, aunque ha mejorado levemente en los últimos días.