Irlanda comienza a administrar dosis de refuerzo a 270.000 sanitarios

El Ministerio irlandés de Salud confirmó este martes que comenzará este fin de semana a administrar vacunas de refuerzo contra la COVID-19 a unos 270.000 sanitarios de primera línea.

El titular del ramo, Stephen Donnelly, explicó que los profesionales recibirán dosis de uno de los dos preparados RNA, ya sean de Pfizer o de Moderna, en torno a seis meses después de completar la pauta original.

Según el ministro, se administrará una de esas vacunas sin tener en cuenta con cual se inmunizaron primero.

Donnelly señaló que ha tomado esta decisión de acuerdo con el asesoramiento del Comité Asesor Nacional de Inmunización (NIAC, sus siglas en inglés), si bien su departamento ya había diseñado el dispositivo necesario para lanzar esta nueva campaña de vacunación de refuerzo.

El Servicio Nacional de Salud (HSE) ha informado de que en torno a 3.500 sanitarios están de baja en este país por enfermedades «relacionadas» con la covid.

En este sentido, la Organización Médica de Irlanda (IMO, sus siglas en inglés) indicó hoy que «durante las últimas semanas, sobre todo», varios hospitales tienen «dificultades» para completar sus plantillas por el aumento de contagiados.

«También se da la circunstancia de que hay sanitarios que están esperando los resultados de las pruebas y otros tienen que pedir bajas para cuidar de familiares enfermos de covid», observó el experto Anthony O’Connor, miembro de la IMO.

El Gobierno irlandés se vio obligado el pasado 22 de octubre a frenar la desescalada ante el repunte de casos y decidió entonces que no eliminaría aún algunas restricciones, tal y como estaba previsto en el plan presentado en agosto.

Las últimas cifras del HSE confirmaron este lunes que se detectaron 2.855 nuevos positivos en las 24 horas anteriores, casi 1.300 más que hace dos semanas, si bien el número de hospitalizados se mantiene en torno a los 500, gracias, en parte a que más de 90 % de la población adulta está vacunada.

Asimismo, ha aumentado con fuerza la tasa de incidencia acumulada por 100.000 habitantes, que se situaba a finales de octubre por encima de los 600 casos a catorce días.